LA PORTIÑA DE SAN MIGUEL EN FOTOS DE 1945

LA PORTIÑA DE SAN MIGUEL EN FOTOS DE 1945

Hoy vamos a conocer la calle Portiña de San Miguel a través de las fotos del Ensanche de 1945 y aguna otra.

En ocasiones he dicho que Talavera más que una ciudad a la orilla del Tajo es una ciudad a la orilla de La Portiña, el arroyo en cuya desembocadura con el Tajo se situaron los primeros pobladores prehistóricos, antes incluso de los romanos que precisamente en esa elevación entre el Tajo y la Portiña que sirve de asiento al casco antiguo de Caesaróbriga.

Detalle de postal de Ruiz de Luna donde se ve el Puente de la Villa

La Portiña se fue cubriendo a su paso por nuestra ciudad desde las proximidades de la carretera de Cervera y luego en el recorrido que hacía por debajo del segundo recinto amurallado hasta confluir con el primer recinto en la zona de Puente Moris y la monumental puerta de Mérida.

Siempre se ha dividido en dos tramos según las parroquias de sus inmediaciones intramuros, la de San Miguel, desde la confluencia con la calle Cerería hasta la de Luis Jiménez de la Llave, donde comienza la Portiña del Salvador.

Quizá el nombre de La Portiña venga del el pequeño puertecillo por el que discurre justo en el lugar donde ahora se encuentra el muro del embalse y donde se desarrollaron los encuentros más violentos de la Batalla de Talavera.

Confluencia en 1945 de la calle Cerería, a la derecha, con San Ginés a la izquierda. Es el inicio de la Portiña de San Miguel ya cubierta en el llamado puente la Villa. Al fondo la calle Marqués de Mirasol.

En la confluencia de Cerería con La Portiña saltaba al arroyo un pequeño puente conocido como Puente la Villa por dar acceso a los arrabales nuevos y, por la plaza del Reloj y arco de San Pedro a la propia Villa, el caserío situado dentro del primer recinto amurallado. Más tarde se llamó puente de las Alcantarillas Nuevas, igual que a la puerta y torre que del segundo recinto amurallado situada allí.

 

Detalle de la foto interior con personajes talaveranos y ambiente todavía rural, y el irregular trazado de Marqués de Mirasol con trasformadores en la vía pública, cuya densidad de circulación era mucho menor.
Plazuela donde confluyen la calle San Ginés, marqués de Mirasol a la derecha y al fondo la plaza de la Cruz Verde, con la arquitectura tradicional de Talavera y acacias plantadas en el talud que formaba el cauce de La Portiña.
Talaveranos cargando leña en la plaza de la Portiña según detalle de la foto anterior
Detalla de la bajada desde el final de Marqués de Mirasola a la la plazuela donde confluye la calle de San Ginés.
El arroyo de la Portiña antes de ser cubierto. Postal de 1906 de Ruiz de Luna.

La iglesia de San Miguel estaba situada prácticamente en la orilla de la La Portiña y aún se mantiene la torre con algunos restos de la misma como el pórtico y unos arcos mudéjares. En una de las fotos del Plan de Ensanche de 1945 que venimos viendo aparece todavía la torre cubierta y con un gracioso hueco del campanario mudéjar con su arco de herradura enmarcado por alfiz de ladrillo en la parte superior y de piedra en la inferior.

La Portiña de San Miguel ya cubierta con la torre todavía techada de la antigua iglesia

Pasada la iglesia de San Miguel había un postigo en el muro del segundo recinto amurallado que tenía una hornacina con una imagen de Ecce Homo conocida como Cristo de la Salud que da nombre a la calle actual y al que se tenía una gran devoción en la villa. Esta pequeña puerta se llamó anteriormente de Vengamedel.

Más adelante había otro puente llamado de las Alcantarillas Viejas o del Pópulo y que se correspondía con la puerta del mismo nombre del segundo recinto amurallado. Se sabe que en el siglo XVII había también allí una «pontezuela de piedra» sobre el arroyo de La Portiña.

Arcos mudéjares de la torre de San Miguel
Detalle de la foto anterior
El poco tránsito por la Portiña de San Miguel permitía disfrutar del sol a los vecinos

El arroyo de la Portiña por su doble condición de corriente fluvial y lindero con la muralla se convertía muchas veces en un muladar lleno de desperdicios que ocasionaba las protestas delos vecinos desde la Edad Media.

Foto de La Portiña de San Miguel, con la torre de la iglesia a la derecha

La zona más ancha en la confluencia con la calle de Santo Domingo y Salmerón se conoció antiguamente como plaza de los Caldereros, por haber allí varios artesanos de este oficio. También se llamó del Cardeal Loaisa por ser este prelado, confesor de Carlos V, el fundador del convento de Santo Domingo.

La topografía del antiguo arroyo de La Portiña condicionó las frecuentes inundaciones de la plaza y traemos aquí una de las fotografías en que se rescata a vecinos junto al antiguo kiosko.

Inundaciones en la zona del puente la VIlla.