OTRAS POSIBLES OBRAS DE JAN FLORIS
Puede que, según nos refiere Pleguezuelo, con anterioridad a sus trabajos de Garrovillas, Cañaveral y Garganta la Olla, Floris hiciera otros trabajos, como el pavimento de la capilla de un mercader de oro y diamantes de la familia de los Benavente en la iglesia Santa María de Medina de Rioseco. En los azulejos de escalones y solado aparecen unas cabezas masculinas y femeninas cuyos motivos ornamentales recuerdan al estilo del ceramista flamenco. También hay azulejos de repetición con veneras y hojas de acanto dispuestas en “remolino” y grutescos de dragones enfrentados. El dibujo está realizado en azul y manganeso y el relleno es de ocres y amarillos. Aunque no hay documentación que acredite su autoría se ha pensado en la autoría de Floris, debido a la fecha de su fabricación en torno a 1560, al mayor tamaño de los azulejos, de 17 centímetros de lado, así como por ciertas formas que recuerdan a las ferroneries.
Una obra de parecidas características se encuentra en el palacio del licenciado Butrón, un famoso abogado de Valladolid. También es un solado en el que se han instalado algunos azulejos planos con decoración renacentista vegetal.
Yo sinceramente no veo la semejanza de los azulejos de Medina de Rioseco, los de Valladolid y ni siquiera los de Garganta antes referidos con la obra de Floris en Garrovillas o Cañaveral, tanto en los motivos como en el color.
Tampoco comparto con Martínez Caviró la autoría de Flores con respecto a los paneles del monasterio dominico de Plasencia, luego iglesia de San Vicente Ferrer, que representan a unos santos dominicos enmarcados porque, aunque cuentan en su ornamentación con decoración de ferroneries, ni su dibujo ni sus colores se parecen en modo alguno a las obras de Floris. Sí tiene esta obra de azulejería de Plasencia todo el aspecto de haber sido elaborada ya en Talavera, aunque puede que bajo la influencia del maestro de Amberes. Esta obra se puede hoy contemplar en el museo de la catedral vieja de esa misma ciudad junto a otros paneles cerámicos talaveranos.
.Además, en el refectorio de Santo Domingo en Plasencia, encontramos en los arrimaderos decoración de ferroneries que para algunos serían obra también de Floris, pero la blancura estannífera de sus esmaltes hace pensar en que, si fue obra de este autor, se habría realizado en talleres ya talaveranos o al menos con técnicas y materiales habituales en la ciudad del Tajo.
Tras el basamento del retablo mayor se oculta en la catedral de Palencia otra obra que según Pleguezuelo también podría ser del artista flamenco y que representa las alegorías de la Fe, la Esperanza, la Justicia y la Fortaleza.