MUSEO DE LOS HORRORES:
DONDE CALIXTO Y MELIBEA HACÍAN MOUNTAIN BIKE
Aunque por cuestiones cronológicas algunos autores niegan la posibilidad de que Talavera sugiriera algunos de los párrafos de La Celestina a su alcalde Fernando de Rojas, otros escritores como el poeta Rafael Morales defienden la tesis de que la acción de la Tragicomedia bien pudiera haberse desarrollado en nuestra ciudad. Tampoco sería extraño que Fernando de Rojas hubiera conocido bien nuestra entonces villa antes de venirse a ella a ejercer su oficio de abogado pues era originario de la cercana localidad de La Puebla de Montalbán. Una de las referencias de la obra inmortal que pudieran tener relación con es debida a que hay en La Celestina una referencia a otro edificio religioso de Talavera, concretamente a la ermita de la Magdalena, que primero estuvo situada en la zona del convento de santo Domingo y más tarde en el que hoy conocemos como paseo de los Leones. Es en este caso Calixto el que dice: “Rezando hoy ante el altar de La Madalena me vino con tu mensaje alegre aquella solícita mujer”.
Pues a nuestros padres de la patria, me da igual el ayuntamiento que estuviera gobernando porque todos han tenido delicadezas como esta con el patrimonio, no se les ocurrió otra cosa que ante los escasos pero significativos restos que quedaban de la ermita de la Madalena, que cubrirlos con tierra y hacer encima un circuito de mountain bike, en lugar de haber dejado muestra consolidando y urbanizando las ruinas del que fue un precioso edificio mudéjar con una bonita evocación poética de la universal Celestina, obra del que fue nuestro alcalde Fernando de Rojas.
Luego, otra corporación ha plantificado en monolito con azulejería donde pone lo de «aquí estuvo lo que usted ya no puede ver», iniciativa frecuente y pintoresca de clara tradición local, pues se viene haciendo con el patrimonio talaverano desde hace tiempo a mayor gloria de nuestros esforzados munícipes, que dios guarde muchos años.