DAMOS UNA VUELTA POR HINOJOSA DE SAN VICENTE
Vamos a describir aquí los puntos de interés de Hinojosa de San Vicente dejando para otras entradas los incluidos en otras entradas por situarse en el Piélago o en la cumbre del Cerro de San Vicente, el que ya conocemos como Monte de Venus, como la Ermita de los Santos Mártires, el castillo, la ermita de la Virgen de los Ángeles, el monasterio o uno de los pozos de nieve, por ejemplo.
Hinojosa, fundada en 1506, era una aldea de Castillo de Bayuela hasta que se hizo villa en 1632.
Paseamos por el casco urbano de Hinojosa, uno de los pueblos con más elementos conservados de arquitectura popular de la Sierra, sobre todo en el extrarradio del lugar, donde cuadras y cochineras conservan el ambiente de lo que eran estos pueblos hace cuarenta años.
No debemos dejar de visitar las tres ermitas: la de Santiago, a poniente del caserío. la de San Sebastián, con un calvario junto a ella, y la de San Roque, con una curiosa decoración popular en la hornacina del santo a base de trazos que parecen simular cerámica.
La plaza conserva todavía las agujas de piedra que en casi todos los pueblos de la sierra servían para cerrar los festejos taurinos y una casa balconada dieciochesca. Descendemos de Hinojosa en dirección sudeste, hacia el arroyo Guadmora que baja desde el cerro de San Vicente, rodeado de prados ,encinas cornicabras moreras y enebros en un paseo agradable que hizo exclamar a un viajero del siglo XVIII que la hermosura de los campos de Hinojosa era similar a la de los de la ciudad italiana de Mantua.
La iglesia parroquial es un templo del siglo XVI en sillería y mampostería granítica con portadas al sur, rodeada de un atrio, y otra en el norte con un panel de azulejos talaveranos. Tiene el aspecto habitual de los templos de la sierra de clara influencia abulense.
Aunque solamente queden algunas pitarrillas como muestra, el vino de Hinojosa tuvo una fama que sobrepasó en tiempos el ámbito comarcal. Fue pueblo que en sus trojes cultivó el gusano de seda hasta los años 60. Sus fiestas de interés en invierno como el Carnaval o la Cencerrá y de primavera como la Enramá.
La iglesia es un templo de mampostería y sillería granítica similar a otros de la sierra y de la diócesis de Ávila a la que pertenecieron estos pueblos de la sierra.
Terminamos nuestro recorrido descendiendo el Guadmora hasta que junto a dos antiguos molinos ya documentados en el siglo XV.