FOTOS ANTIGUAS DE LA CALLE CARNICERÍAS
Traemos hoy algunas fotografías de la calle Carnicerías que debe su nombre a que en ella se situaron desde antiguo las carnicerías municipales, pues esta actividad de la venta de carne era un monopolio del ayuntamiento y a ellas debían acudir a comprar los talaveranos. Parece que antes del siglo XVI se llamó calle de las Verduras
Va de la Plaza del Reloj a la Ronda del Cañillo y pero antiguamente su tramo inferior era en parte la calle Pescaderías que venía desde el arco de San Agustín, hoy reconstruido,y más abajo la calle que se llamó del Cuerno desde antiguo y que continuaba con la calle Sevilla, llamada así por desembocar en la puerta del mismo nombre, de la que conservamos el arco.
Al final de ambas confluían por tanto, junto a la alcazaba, el primer y el segundo recinto amurallado. Hoy la calle está delimitada al oeste por la muralla de ese primer recinto y los muros de la alcazaba.
En tiempos de la Segunda República se llamó de García Hernández en honor del militar fusilado junto a Fermín Galán por pronunciarse para la proclamación de la República. En los años sesenta esta segunda parte de la calle Carnicerías se reformó para de los dos callejones antes referido dejar una sola avenida con el nombre de Jose Antonio Primo de Rivera hasta que en los años 80 se denominó a toda la avenida calle Carnicerías.
Dos de las fotografías son vistas muy parecidas de la colección de postales que hizo Ruiz de Luna.
En ellas se ve una considerable actividad comercial, especialmente de melones y sandías. Se perciben curiosos tipos de campesinos de principios del siglo XX y los poco higiénicos albañales de aguas residuales que recorrían la ciudad y a los que se refirieron muchos viajeros por los charcos putrefactos y malos olores que producían, además de ser un medio ideal, el de las aguas estancada, para reproducirse los mosquitos que trasmitían el paludismo endémico en Talavera hasta hace unas décadas.
También es interesante la arquitectura tradicional con los balcones que cantaba el poeta Rafael Morales. También es de destacar la vista que nos ofrecen las fotografías de la antigua torre del Reloj.