LA INCURIA PERMITE QUE EL PALACIO DE LOS MARQUESES DE VELADA, QUE ALOJÓ A GOYA Y BOCHERINI SE ARRUINE COMPLETAMENTE

El palacio de los marqueses de Velada en la localiddad del mismo nombre sucumbe víctima del abandono de sucesivos propietarios y de las diferentes administraciones. Junta de Comunidades, Diputación y ayuntamiento deberían hacer algo al respecto, que no todo son «Quijotes» y capitalidades gastronómicas en Toledo.
Se trata del palacio de una de las casas nobiliarias más antiguas de España y muy influyente en diferentes épocas de nuestra historia.

En él estuvo desterrado de la corte don Luis de Borbón infante de España y en principio heredero de la corona, aunque esa es otra historia de la que hablaremos otro día.
Vivió en Velada hasta que se construyó su palacio de Arenas de San Pedro y con él estuvieron su pintor Goya, que luego haría un retrato de la familia de don Luis y de sus hijas «velaínas», la condesa de Chinchón y su hermana. El gran músico Bocherini compuso algunas de sus obras en este arruinado palacio y también frecuentaron sus jardines reyes y grandes de España durante diversas épocas.

Lamentablemente los restos del palacio apenas se tienen en pie, con las vigas podridas y los muros agrietándose sin que nadie haga nada por remediarlo, las ruinas de la casa solariega de los Marqueses de Velada, famosa en otros tiempos por sus jardines con fuentes y estanques y sus plantaciones de “naranjos, limones y cidros y zamboos y otros árboles y flores de mucha fruta”.

Hasta hace poco se apreciaban en su interior las grandes estancias, la bodega, la repostería y la sala cubierta de azulejos talaveranos del siglo XVII, hoy en el Museo Ruiz de Luna, sobre la que se ve todavía una linterna de ladrillo y cupulilla rematada por una cruz. También quedan restos del estanque y alguna reja de interés. El escudo de los marqueses ha sido repicado en el dintel de la entrada principal. Sus muros mantienen aún el rótulo de Cuartel de Milicias Falangistas, destino que tuvo el edificio durante la Guerra Civil.
También poseían los marqueses de Velada un magnífico palacio renacentista frente a la catedral de Ávila que ha sido rehabilitado como lujoso hotel y restaurante que lleva el nombre de esta casa nobiliaria.